Por: Dr. Danilo Antonio Castillo G.
La teniasis es una
infestación intestinal causada por la forma adulta de grandes tenias, y la
cisticercosis es una infestación de los tejidos producida por la forma larvaria
de una especie, Taenia solium.
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Cisticercosis bovina |
Las tenias o solitarias
(llamadas así por que generalmente se encuentra una sola) ya eran conocidas
desde la civilización egipcia, pues fue consignada en el papiro de Ebers (1550
a.C.). En 1762, Goeze identificó a T.
saginata y la diferenció de T. solium. En 1852 Kuchenmaister infectó voluntarios
humanos con Cysticercus cellulosae para obtener el adulto de T. solium. La cisticercosis (o cisticerciasis) es
conocida desde hace tiempo; Moisés dictó leyes sanitarias para protegerse
contra la carne de animal infestada con piedra (cisticercos), mediante la
prohibición de su consumo. Los griegos
Aristófanes y Aristóteles, describieron la cisticercosis de la lengua del cerdo
como semejante al granizo. Gessner
(1558) y Rumler (1588) dieron a conocer la presencia del cisticerco en el
hombre. Kuchenmeister (1855) y Leuckart
(1856) estudiaron el ciclo biológico, demostrando que la forma vesicular que se
encuentra en los tejidos del cerdo al ser ingerido por el hombre, da lugar al
parasito adulto en su tubo digestivo.
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Taenia solium |
Es producida por la
Taenia solium, tenia de la carne de cerdo, causa infestación intestinal en su
forma adultas y en los tejidos por medio de sus larvas (cisticerco). Taenia saginata, la tenia de la carne de res,
causa sólo infestación intestinal por el gusano adulto. La T. solium puede medir de 2 a 4 metros,
mientras que la T. saginata de 5 a 7 metros.
Su distribución es
mundial, siendo frecuente en los lugares que la carne de res o de cerdo se
ingiere cruda o insuficientemente cocida, y en los que las condiciones
sanitarias permiten a los cerdos y a las reces tener acceso a las heces
humanas.
Los seres humanos son
los hospederos definitivos de ambas especies; el ganado bovino es hospedero
intermediario de T. saginata y el cerdo de T. solium.
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Ciclo de Infestación |
Una persona infestada
expulsa los huevos de T. saginata, infesta sólo al ganado bovino que en sus
tejidos musculares se transforma en quiste; el humano al consumir dicha carne,
consume los cisticercos que en los intestino, las larvas se transforman en
tenia adulta, que se adhiere a la mucosa del yeyuno. Relativo a T. solium su infestación se
produce cuando una persona consume carne de cerdo contaminada, con el
desarrollo posterior del gusano adulto en el intestino. Sin embargo, la cisticercosis humana puede
producirse por la transferencia directa de los huevos de T. solium de las heces
de una persona que alberga tenias adultas, a su propia boca o a la de otra
persona, o de forma indirecta, por la ingestión de agua o alimentos
contaminados por huevos (del parasito). Cuando
las personas o los cerdos ingieren huevos de T. solium, el embrión sale del
huevo, penetra la pared intestinal, pasa a los vasos linfáticos o sanguíneos y
es transportado a diversos tejidos en los cuales se desarrolla hasta producir
la cisticercosis.
En las teniasis el
cuadro clínico es poco característico y de poca gravedad, en general 2 a 3
meses después de la ingestión de los cisticercos aparecen síntomas variables de
distinta intensidad entre las personas infestadas, pero habitualmente no se
presenta sintomatología. Entre los
síntomas generales se puede presentar aumento del apetito, pero con mayor
frecuencia anorexia y bajo peso, diarrea, dolor en parte alta y media del
abdomen, sensación de hambre, prurito anal y la observación de los segmentos
inferiores del parasito (proglótidos) al evacuar.
En el caso de la
cisticercosis los síntomas dependerán del área de localización:
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Tres Áreas de Localización de la Cisticercosis |
- Mucosas:
Predomina en boca y debajo de la lengua, donde la molestia se limita a un
simple levantamiento.
- Tejido
subcutáneo (debajo de la piel): Sólo se detecta un nódulo no doloroso móvil.
- Muscular:
Asintomáticos o con ligeras alteraciones dolorosas por compresión de
terminaciones nerviosas, detectados ocasionalmente por estudios radiológicos
cuando están calcificados.
- Ocular:
Cuando se encuentra en la cámara anterior del ojo puede observarse fácilmente,
más no en la cámara posterior. Mientras
está vivo ocasiona pocos problemas a diferencia de cuando muere, ya que produce
una fuerte inflamación que puede requerir la enucleación del ojo (extirpación
total del globo ocular).
- Sistema
nervioso central: Si se aloja en el tejido cerebral puede afectar nervios
craneales por mecanismos compresivos, pero si la larva muere se presentan
alteraciones inflamatorias y alérgicas con inflamación de los vasos y
meningitis basal crónica que frecuentemente causa la muerte. En caso que interfiera con el flujo
cefalorraquídeo puede producir hipertensión intracraneal cuyos síntomas
característicos son dolor de cabeza, alteraciones de la visión, vómitos,
cuadros convulsivos, perturbaciones psiquiátricas etc.
El diagnóstico se
realiza por la identificación de los proglótidos (segmentos), los huevos o los
antígenos del gusano en las heces. La
diferenciación de especies de taenia es importantísima pues la solium tendrá un
pronóstico más severo, ya que existe la probabilidad de autoinfección y
desarrollo de la cisticercosis. Los cisticercos
subcutáneos luego de su extirpación pueden ser diagnosticados con
facilidad. La cisticercosis
intracerebral y de otros tejidos pueden
diagnosticarse con la tomografía axial computarizada o resonancia magnética,
por radiografía cuando se calcifican los cisticercos. Los estudios en suero deben confirmar el
diagnóstico clínico.
Entre las medidas
preventivas tenemos:
- Educar
a la población para evitar la contaminación fecal de la tierra, el agua y los
alimentos destinados a la población y a
los animales; evitar el uso de aguas servidas para irrigar los pastizales, y
cocer completamente la carne de cerdo y de res.
- La
identificación y el inmediato tratamiento para las personas que albergan las
formas adultas de T. solium para evitar la cisticercosis humana, con el fin de
proteger al mismo paciente y a sus contactos.
- El
congelamiento de la carne de cerdo o de res a temperaturas menores de 5 °C
durante 4 días destruye eficazmente los cisticercos.
- Impedir
el acceso de los cerdos a las letrinas y a las heces humanas.
Respecto al control del
paciente, los contactos y del medio ambiente, tenemos:
- Notificar
a la autoridad de salud local
- Eliminación
sanitarias de las heces, insistir en las medidas estrictas de sanidad y lavado
minucioso de manos después de defecar y antes de comer.
- Evaluar
los contactos con síntomas.
- Aplicar
el tratamiento específico y de ser necesario a nivel hospitalario sobre todo en
la cisticercosis del sistema nervioso.