Panamá-Chiriquí, sábado 17 de noviembre de 2012.
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Por: Dr. Danilo Antonio Castillo G.
En al primera parte se
entregó un resumen histórico, la morfología del parasito, su distribución,
forma de contagio y período de incubación; hoy con su cuadro clínico y medidas
preventivas concluiré.
La susceptibilidad a la
infestación es general, pero la inmunidad se adquiere fácilmente. Se desconoce la duración y el grado de
inmunidad, pero se supone que es duradera y permanente. Los pacientes que reciben inmunosupresores o
los enfermos de SIDA, pueden padecer la enfermedad por reactivación de la infección.
Las infecciones a
menudo son asintomáticas, o surgen de la forma de un cuadro agudo que comprende
linfadenopatía (afección de los ganglios) y linfocitosis (aumento de los
linfocitos) que persisten durante semanas o días. Con la aparición de una respuesta inmunitaria
disminuye la parasitosis en sangre, pero
en los tejidos persisten quistes de Toxoplasma que contienen microrganismo
viable los cuales pueden reactivarse cuando se debilita el sistema
inmunitario. La toxoplasmosis adquirida
después del nacimiento puede ser:
- Ganglionar: Es la más frecuente en el adulto, involucra padecimiento de ganglios superficiales de predominio en cuello, arriba de la superficie clavicular, en las regiones axilares e inguinales; acompañadas de malestar general, dolor de cabeza, fiebre, dolores musculares y en la tercera parte de los casos crecimiento del bazo e hígado.
- Generalizada: A la forma anterior, con crecimiento de bazo e hígado, se le agrega inflamación del músculo cardiaco, pulmones y musculo esquelético; cuadro de confusión que puede llegar al estado de coma, alteración de los reflejos osteotendinosos, convulsiones, debilidad o parálisis.
- Ocular: Se caracteriza por dolor, intolerancia a la luz, visión borrosa y enrojecimiento ocular.
La toxoplasmosis
intrauterina, también llamada congénita, puede
ser:
- Subclínica: Los que se han detectado casos de retardo mental después del segundo año de edad.
- Con manifestaciones clínicas: Peso por debajo de lo normal, prematurez, inflamación pulmonar, inflación cardiaca, crecimiento de hígado y bazo, manchas de la piel, sueño persistente y profundo con alteración de los reflejos, quejidos y convulsiones, hidrocefalia (aumento de líquido en el encéfalo) que al ser progresiva conduce a la muerte y afección ocular característica.
- Secuelas: Consisten en retardo mental, convulsiones, afección ocular previamente mencionadas y sordera.
El diagnóstico se basa
en signos clínicos y en la confirmación por medios de estudios en suero
sanguíneo, la demostración del agente causal obtenido de alguna muestra de
material biológico, sustentan el diagnóstico.
El aumento de los niveles de anticuerpos corrobora la presencia de
infección activa (Toxo IgM y Toxo IgG).
Los niveles elevados de anticuerpos IgG pueden persistir elevados
durante años sin tener relación con la enfermedad activa.
Respecto a las medidas
preventivas tenemos que educar a las embarazadas a consumir carnes cocinadas a
66 °C, no limpiar los recipientes con arena que contengan excretas de gatos ni
estar en contactos con ellos, usar guantes durante las labores de jardinería y
lavarse perfectamente las manos después del trabajo, al manipular carne cruda y
antes de comer. A los gatos se les dará
alimentos secos, enlatados o hervidos, y se les impedirá la caza de
roedores. Deben eliminarse diariamente
la arena, sin sacudirla, donde realizan las necesidades los gatos, desinfectar
los recipientes con agua hirviendo; utilizando guantes. Las heces pueden echarse al retrete, quemarse
o enterrarse a gran profundidad. El tratamiento
específico está indicado en los casos de infección inicial durante el embarazo,
o por la presencia de coriorretinitis, miocarditis o afección de otros órganos.
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